La Illeta dels Banyets, o «Baños de la Reina» como es conocido popularmente este espectacular yacimiento de El Campello, ha sido testigo del paso de las más importantes civilizaciones del Mediterráneo.

Desde la prehistoria hasta la llegada de Roma, los pueblos que aquí se han asentado han procurado obtener el mejor rendimiento de este emplazamiento, esencialmente con el desarrollo de actividades relacionadas con el mar y la pesca. Uno de los usos más destacados y de mayor envergadura fue la construcción, en época romana, de un entramado de «piscifactorías“ o «viveros de pescado”. Estas construcciones dotaban también de gran prestigio al enclave, ya que el “garum” hispano era el más apreciado y cotizado en Roma, dando pie a multitud de intercambios comerciales.
Encontramos además una hermosa coincidencia en nuestro entorno cercano, la existencia de tres yacimientos romanos: Calpe, El Campello y Jávea, conocidos también con el nombre de «Baños de la Reina», únicos en la península Ibérica. Sus vestigios nos hablan de una actividad productiva y comercial basada en el mar y la sal, que «generó una pequeña población que construyó sus casas sobre las dunas costeras, dando lugar a un urbanismo selectivo y diversificado», según palabras de la arqueóloga Ana María Ronda.
Bajo la premisa de «una mirada hacia atrás», un grupo de estudiantes de Arquitectura de la Universidad de Alicante han propuesto nuevos usos apostando de nuevo por la acuicultura, «el cultivo del mar», pero adoptándola a un paisajismo adecuado y sostenible.
Hasta el 2 de junio, el vestíbulo de la Biblioteca Municipal ‘Rafael Altamira’ acoge una exposición, que además del proyecto de La Illeta, recoge otros relacionados también con El Campello, como El Puerto, la desembocadura del Rio Seco o el cercano Balneario de Aigües.
Esta exposición, que recorrerá los tres municipios (El Campello, Calpe y Jávea), constituye una oportunidad que volverá a unir a estas tres poblaciones en donde el pasado nos habla de una actividad que se basó en el mar.